El instituto

El instituto ése sitio tan odiado por personas como yo, ese sitio en el que por razones que siempre he ignorado, me duele todo el cuerpo nada mas sentirme ahí, dentro de esas aulas escuchando yo que sé cuantas horas seguidas a personas que ni siquiera conoces, hablar de cosas que no vienen a cuento en tu vida, ni que te servirán para avanzar en lo que de verdad quieres conseguir. Nunca ayuda a la hora de perseguir un sueño. ¿Qué pasa si tu sueño no tiene por qué pasar por los estudios del instituto? ¿Qué pasa si tu sueño es crear a partir de lo que tu imaginación pueda ver? Hay muchas formas de crearse un futuro sin depender de una absurda fórmula o de saber la tabla periódica de arriba a abajo. A veces nuestros sueños son otros. Nuestros sueños pueden basarse simplemente en intentar conocernos a nosotros mismos, saber si en realidad nos queremos tanto como pensamos o es solo una mentira que nos hemos acabado por creer. Necesito mi tiempo, mi espacio, todo eso que el instituto me quita. Intento meterme en la cabeza que me hace falta, que tengo que superarlo para avanzar, para conseguir mis metas, lo que de verdad me importa, lo que me hace sentir bien. Tengo que pasar por esto, lo sé, pero me hace daño, me duele y eso no lo aguanto. Intento seguir adelante, para no mandarlo todo a la mierda. A veces creo que es imposible y sé que necesito varias oportunidades, que si no no avanzo. 
Soy así, y si pudiera o supiera cambiar para salir del agujero que yo misma me he creado con esto, lo haría, lo haría si supiera con certeza que todo el esfuerzo que haga servirá para ser un poco mas feliz.