Y tu,

¿qué quieres que diga? ¿Qué me pides que te cuente? No voy a mentirte, al menos, no a ti. Hace mucho tiempo que te quiero y reconozco que al principio hubiese dado todo lo posible por no enamorarme de ti, en serio, cada vez que miraba tus fotos me odiaba porque sabía que estaba empezando a cogerte más cariño del que debía. Intenté alejarme de ti, no pude, y cuando volví a tu lado tenía una idea muy clara: quería olvidarte. Pero como era de esperar tampoco lo conseguí y entonces me quedó otra idea aún más clara: te quería. Y ¿sabes? TE QUIERO. Y es la frase más sincera que he dicho nunca.